Jesús Oria, Consejero de Medio Rural, Pesca y Alimentación || Foto: Roberto Ruiz

A caballo entre el campo y las fábricas clásicas, de las de chimeneas que echan humo, está el sector de la transformación agroalimentaria, el más pujante que tenemos en la actualidad en Cantabria, con todos los indicadores apuntando hacia arriba en estos últimos años de crisis global.

Una industria en la que “lo mejor está por venir”, según el consejero de Medio Rural, Jesús Oria, en una entrevista concedida a EL FARADIO.

Y eso que las empresas del sector no han dejado de cosechar prestigio este 2016, como el orujo Justina de Liébana, de ORULISA, premio nacional a la innovación de la mujer rural, además de diversas medallas en concursos internacionales.

O la destilería Siderit, que ha sido premio HORECA, el que conceden los hosteleros y los medios de comunicación a la empresa que mejor exporta el nombre de Cantabria fuera de nuestras fronteras, y que además ha sido la revelación de la revista Actualidad Económica.

Pero es que la lista de referentes del sector puede ser interminable, con Dromedario, que se ha alzado con nuevos trofeos en los Great Taste Awards; Conservas Catalina, por su sabor superior en los Superior Taste; la cervecera Dougalls y su triple premio en el Beer Challenge de Barcelona o los quesos de Peña Pelada, premio internacional también, Cincho de Oro.

Son sólo algunos ejemplos de las buenas sensaciones que nos dejan algunas de las firmas que más reconocimiento están alcanzando en la elaboración de sus respectivos productos, en el panorama nacional e internacional.

Sensaciones acompañadas por las buenas cifras que arroja el sector.

EMPLEO, INVERSIÓN Y VALOR AÑADIDO

La industria agroalimentaria de Cantabria fija más de 6.500 trabajadores, un 21% del sector industrial, y el empleo está creciendo un 1,2%, frente a una caída en España de un 1,7% de media en los últimos 5 años.

Aunque la elaboración de los productos de Cantabria (sobaos, quesadas, anchoas…)  nos traslade a una imagen muy tradicional de este sector, que puede llegar a considerarse artesano según que casos, alcanza ya el 13% de la inversión del conjunto de la Industria en nuestra comunidad autónoma.

De los 3015 establecimientos industriales, 486 son alimentarios y es la rama del sector secundario que más Valor Añadido Bruto crea: 487 millones de euros, un 23% de los más de 2.000 millones de valor añadido de la industria en Cantabria.

Según el consejero, “ahora se empiezan a ver los frutos” de un trabajo que “hemos venido macizando durante muchos años” – y cita a Gancedo, su predecesor, y a su anterior etapa de Gobierno entre 2003 y 2011.

DOBLE DE APOYO AL SECTOR AGROALIMENTARIO

“Si podemos vamos a multiplicar por dos el presupuesto para que esas pequeñas industrias agroalimentarias accedan a hacerse más grandes o a implantarse”, asegura Oria, a las puertas de un acuerdo para la aprobación del presupuesto de Cantabria para el año 2017.

Un documento económico en el que el Medio Rural volverá a ser protagonista, después de una caída sostenida desde un máximo de 140 millones de euros hasta los 102 millones con los que dejó su departamento Oria en 2011 y los 72 con los que ha regresado a gestionar este área en 2015.

“Si nos dan entre 10 y 15 millones de euros más, yo encantado de la vida”, celebra Oria, con la vista puesta en apoyar a la “población del mundo rural” que se dedica a la fabricación de productos “de excelencia”.

Tal y como apunta, el sector agroalimentario será el más beneficiado de la subida presupuestaria en su departamento, con el objetivo de “ligar esta industria con los espacios naturales protegidos”.

En este sentido, avanza la creación de un sello de calidad a a los productos que se hagan en parques nacionales, naturales, zonas de la Red Natura 2000, Lugares de Interés Comunitario (LICs) o Zonas de Especial Protección de Aves (ZEPAs)

El Gobierno de Cantabria quiere potenciar la carne de Cantabria, que ya cuenta con sello de calidad europeo, la Indicación Geográfica Protegida (IGP), con la “potenciación” de una raza autóctona Tudanca, porque “a veces no es cuestión de dar ayudas al ganadero, sino por dar valor añadido a esa carne”.

Además, el consejero reivindica que su departamento no va a cejar en el empeño de “hacer todo tipo de promoción, dentro y fuera de la región”.

OTRAS PRIORIDADES: LUCHA CONTRA INCENDIOS…

“Yo digo que me den 15 millones para una serie de proyectos” explica el consejero de Medio Rural, que defiende ‘lo suyo’ en el seno del Gobierno con inversiones concretas.

Así, destaca el trabajo de la Mesa del Fuego, que desembocará en la contratación de nuevo personal en las cuadrillas de montes y agentes del medio natural. Tras un acuerdo con los cinco sindicatos, el Gobierno quiere cubrir 26 plazas, invertir en una nave forestal en Valderredible y en una motobomba para “reponer material que ya es antiguo”.

La conciencia sobre la escasez de medios humanos y materiales terminó de activarse hace un año, cuando se desencadenó la ola de incendios en la montaña cántabra, con un balance de 12.000 hectáreas arrasadas y 90 millones de euros en pérdidas.

“El Ministerio nos dio 150.000 euros, una limosna en comparación con los daños”, critica Oria, que recuerda que Cantabria pidió para restaurar las zonas más dañadas, en los espacios protegidos en el Parque Natural de los Collados del Asón y en el Parque Natural del Saja-Besaya.

Sin embargo, según el consejero, la cantidad destinada por el Gobierno de España sólo da para rehabilitar 60 o 70 hectáreas de las 12.000 quemadas en el inicio del pasado invierno.

En todo caso, de cara a esta temporada, confía “más en la profesionalidad de la gente que en las últimas lluvias”, que poco pueden hacer de cara a los pastos porque “ya estamos en la otoñada”.

…Y PLAN DEL LOBO

Cuando el PRC recuperó el Gobierno entendió que “era una ocasión única” para solucionar las asimetrías en la gestión de los daños de los lobos al ganado. Se acababan de sentar juntos los cazadores, los conservacionistas y los ganaderos, y el departamento de Oria quiso “retomar el asunto”.

Está previsto que el próximo trimestre, el primero de 2017, vea la luz el primer ‘Plan de Gestión del Lobo’ con el objetivo de que la Consejería de Medio Rural pueda cubrir los daños que produce el lobo fuera de la Reserva Regional de Caza (Saja, Campoo, Liébana, Besaya, Nansa…) y llegar a zonas como Soba o Gurieza, que en la actualidad dependen de que abonen los gastos los cotos de caza, que “normalmente se llaman a andanas y no pagan”.

“Queremos extender el pago por daños de lobo a todos los ayuntamientos”, al tiempo que “deje de ser especie cinegética – objeto de caza- salvo que haya autorización de la Consejería”.

Además, el control de la población pasará a depender de los agentes del Medio Natural.

Entre las políticas que quiere acometer Oria con el incremento del presupuesto, también cita la erradicación de especies invasoras, como los plumeros o el avispón asiático.

LOS DIQUES DE LA MAGDALENA

Foto: Roberto Ruiz

Desde que ha vuelto a Peñaherbosa, en realidad al PCTCAN (Parque Científico y Tecnológico), que es donde está ahora la consejería de Medio Rural, uno de los asuntos de más trascendencia mediática, por el conflicto entre administraciones, ha sido el de la oposición del Gobierno al proyecto de los diques de la playa de la Magdalena por la falta de informes de evaluación ambiental.

“No tenemos nada en contra de que la playa de la Magdalena tenga arena todo el año”, asegura Oria, al tiempo que subraya que el puntal de Somo y la desembocadura del río Miera es un LIC de la Red Natura 2000.

“Lo único que le hemos pedido al ministerio es que nos asegure en un informe que con la construcción de esos diques no se va a producir una dinámica de las aguas que nos destruya ese LIC que tenemos la obligación de salvaguardar”, subraya.

En este sentido, Medio Rural ha pedido la paralización temporal del procedimiento en la Audiencia Nacional para que en un plazo de 60 días prorrogables – de los que han transcurrido 45- se pueda alcanzar un acuerdo que “garantice que El Puntal y estuario del Miera no va a sufrir ningún daño con la construcción de los diques”.