El sector agroalimentario será una de las caras visibles de Cantabria en el gran escaparate que es FITUR, la feria internacional del turismo, toda vez que ya viene siendo uno de los mejores embajadores de la comunidad autónoma en el exterior, donde cada vez más exporta sus productos.

Lo sabe mejor que nadie Siderit, la destilería de ginebra y vodka, en pleno proceso de expansión, que este mismo año veía reconocida su trayectoria, muy marcada por la presencia internacional, con el premio HORECA que cada año conceden los hosteleros cántabros a quienes llevan la imagen de la comunidad en el exterior.

Los impulsores de Siderit

Pero también otros referentes, como Orulisa, que entre sus sucesivos premios ha cosechado el de la Innovación en la Mujer Rural, un clásico como Café Dromedario, mejor marca de Cantabria para la revista Ejecutivos o las conserveras santoñesas, cuyo homenaje en forma de libro (Sobadoras) ha batido récords.

Buena parte de estas empresas (Dougals, Brezomiel, PeñaPelada, Catalina…), junto a grupos hosteleros como el Cañadío impulsado por Quirós o el Deluz que tienen ambos ya varios establecimientos en Madrid, han trascendido los límites de la comunidad, adentrándose en el mercado internacional exportando sus productos y cosechando premios.

Por eso, por ese papel no sólo de atracción a Cantabria sino de vendedor de nuestra imagen fuera, el sector agroalimentario tendrá una presencia especial en la presencia cántabra en FITUR, la Feria Internacional del Turismo, que se celebra esta semana en Madrid.

Allí, los productores del sector agroalimentario han ofrecido sus productos para las degustaciones que podrán hacerse en el stand cántabro o en la recepción institucional del Gobierno autonómico este jueves en la Casa de Cantabria en Madrid, y donde dado que la presencia cántabra pivotará en torno a la celebración del Año Santo, habrá atención especial a la gastronomía de la comarca de Liébana.

Marcas como Café Dromedario han lanzado una edición especial de sobres de azúcar centrada en el Año Lebaniego.

También colaborarán los alumnos de la Escuela Turismo de Altamira y de la Escuela de Hostelería José Luis González de Peñacastillo en sus labores en el stand cántabro y los cocineros, incluidos los Estrella Michelin y Soles Repsol, en un año en el que el restaurante Annua de San Vicente de la Barquera, liderado por el chef Oscar Calleja, ha conseguido la segunda estrella Michelín y el Cenador de Amós ha sumado también una segunda estrella.

Asimismo, han renovado sus estrellas los cocineros Nacho Solana (‘Solana’); Toni González (‘Nuevo Molino’) y Roberto Terradillos (‘El Serbal’) y hay otro cántabro que llega a la élite de la cocina española: Miguel Cobo, que tiene el Restaurante Cobo Vintage en Burgos y comenzó su andadura en el mundo culinario en la Escuela de Hostelería “Peñacastillo” de Santander.

Además de la recepción del jueves, el viernes, Día de Cantabria en FITUR, habrá un cóctel por el Grupo de Acción Local de Liébana.

La industria agroalimentaria de Cantabria fija más de 6.500 trabajadores, un 21% del sector industrial, y el empleo está creciendo un 1,2%, frente a una caída en España de un 1,7% de media en los últimos 5 años.

Es la rama del sector secundario que más Valor Añadido Bruto crea: 487 millones de euros, un 23% de los más de 2.000 millones de valor añadido de la industria en Cantabria.

De hecho, se estudia la creación de un sello de calidad para los productos que se hagan en parques nacionales, naturales, zonas de la Red Natura 2000, Lugares de Interés Comunitario (LICs) o Zonas de Especial Protección de Aves (ZEPAs).