El grupo hostelero Deluz ha sido reconocido por su trayectoria histórica en la contratación de trabajadores en riesgo de exclusión social.

Deluz es el grupo de los hermanos Zamora, y tiene entre sus establecimientos Deluz, Días de Sur, El Machi y El Italiano en Santander, y La Carmencita, Celso y Manolo, y La Vaquería Montañesa en Madrid.

Isabel, Reyes, Patri y Ricardo, parte del equipo de De Personas cocinando con sentido.

Es frecuente ver en ellos empleados de otras nacionalidades, fruto de la experiencia y sensibilidad de sus impulsores, Carlos y Lucía Zamora, por la situación de los inmigrantes (con los que trabajó ella en su labor en la ONG Cantabria Acoge).

El grupo, que prioriza en sus contrataciones a proveedores locales y se ha implicado en la mejora de la calidad en la alimentación que se da en los comedores escolares, cuenta además con el catering social ‘De personas cocinando con sentido’

Es un proyecto en colaboración con la asociación Ampros (formalmente es una empresa de la que ambos son socios), seleccionado recientemente como buena práctica en Madrid Gusion y con el que ya fueron finalistas al premio Basque Culinary World Prize, con los que se reconoce el poder transformador para la sociedad de la gastronomía.

Las personas que trabajan en él son personas con discapacidad. Ofrecen hasta 1.000 comidas al mes a guarderías, personas con movilidad reducida, colegios públicos como el Cisneros, tres guarderías, un centro de mayores Fundación de Enfermos de Alzheimer, AMICA , ASCASAM, Fundación Síndrome de Down y en todos los centros y residencias de AMPROS.

El reconocimiento les vino de la mano de la Obra Social ‘la Caixa’, que tiene un programa específico para la integración de personas o colectivos en riesgo de exclusión, el programa ‘Incorpora’, que ya les concedió un premio en el año 2013 por contratar ocho personas de colectivos como jóvenes en riesgo de exclusión, madres solteras o adultos en paro con dificultades para su inserción por su edad.

En este caso el premio es un reconocimiento especial por su trayectoria continuada, y coincide con el décimo aniversario de la implantación de este programa en Cantabria, bajo el lema ‘Trabajos que dan vida.

En concreto, el galardón, concedido durante una gala celebrada esta semana en el Palacio de Exposiciones, es un reconocimiento especial, que les entregó el propio presidente cántabro Miguel Ángel Revilla, por su trayectoria de colaboración con la Obra Social «la Caixa» durante estos diez años en los que no solo ha contratado a un gran número de personas, sino también por la calidad y la estabilidad de los puestos.

En el transcurso de la ceremonia han sido premiadas varias empresas por su implicación con la causa.

Así, recibió un galardón al Restaurante ‘La Mulata’ de Puertochico en la modalidad de ‘Empresa implicada especialmente en la mejora de la empleabilidad de los beneficiarios Incorpora’ y, concretamente, por haber proporcionado prácticas y posteriores contrataciones de ayudante de cocina y de ayudante de camarero a personas de la Asociación Nueva Vida. Ha recogido el premio su propietario, Francisco Bezanilla.

El resto de los homenajeados han sido Rebeca Jiménez, en la categoría de ‘Emprendedora Incorpora’, por haber puesto en marcha con éxito la empresa Limpiezas y Servicios Sociosanitarios ACL y por su voluntad de contratar a personas a través de este programa cuando su negocio se consolide; Primark, en la categoría de ‘Empresa que ha destacado por su alto nivel de inserciones a lo largo de estos 10 años’, con 12 inserciones en la tienda de Santander en el último año, y el Grupo Empresarial Sardinero, que ha recibido el premio a la ‘Empresa decana vinculada al Programa’ desde su nacimiento.

Durante estos diez años, el programa Incorpora ha apoyado la contratación de 2.000 personas en riesgo de exclusión social.