¿Cómo es posible que desde 2015 haya más casos enjuiciados por terrorismo y enaltecimiento del terrorismo que en los peores años que España ha sufrido los actos del terror?

Esa es una de las preguntas que se pueden extraer del evento ‘¿Cantar es delito?’ que ha organizado la asamblea Libres en La Vorágine, con un encuentro con raperos locales como Dj UVE, Ludovico y Guillermo Enforma.

Los tres raperos participantes en el acto de La Vorágine.

Pues la respuesta es la Ley Mordaza y el conjunto de leyes y modificaciones del Código Penal que se han establecido en los últimos años, tal y como ha denunciado el abogado de Libres, Dario Serrano. Y parece que han revolucionado el panorama judicial porque en 2017 se investigaron en la Audiencia Nacional 35 casos por enaltecimiento del terrorismo, mientras que en 2012, el último año en activo de ETA, hubo 5 casos que llegaron a la Audiencia Nacional y una sola condena.

“Lo que están haciendo sí es terrorismo”, ha criticado el abogado al comienzo del acto. “Según la nueva ley la condena por difundir estas declaraciones son de dos años y un día de cárcel. Los raperos ya solo por colgar sus canciones ya cumplen este requisito y tienen la condena de cárcel asegurada”, recuerda.

Por ello ha criticado esta serie de leyes, que considera un “cajón desastre donde todo vale”. “Antes, para condenar a alguien se requería que se probara que también fueran a llevarlo a cabo. Ahora ya no hace falta”, añade. Es más, también recuerda que hay una sentencia del Tribunal Supremo que, en casos como en redes sociales como Twitter, “si alguien publica algo puede ser considerado terrorista y, si alguien lo retuitea, también lo es. Según esta cuestión, ¿quién no es terrorista?”.

LOS “CÓMPLICES” DE ESTA REPRESIÓN

El debate estaba centrado sobre las condenas a raperos como Valtónyc, Pablo Hasel o La Insurgencia, que podrían representar lo que en la asamblea han denominado la “disidencia cantada”.

Pero el encuentro se ha convertido enseguida en un acto horizontal en el que se han debatido las causas y cómplices que llevan a que ciertos discursos, cantados o no, se hayan convertido tan fácilmente en delito.

Serrano también ha destacado que la Ley Mordaza ha sido una herramienta necesaria, que ha venido acompañada con cambios legales que permiten al Gobierno regular los nombramientos de los jueces, para asegurarse de tener en los juzgados a aquellos conservadores más proclives a esas condenas; o que ha cambiado el modo en que se llevan estas causas a los tribunales, dando cada vez más poder a los grupos de ultra derecha como Manos Limpias o similares que han actuado libremente contra estas personas.

“Además, este es el Código Penal de los sospechosos que también condena, no solo a los que hacen, sino a los que pueden hacer”, ha insistido Serrano.

“Esto también se debe a que aquí nunca hubo una ruptura con el franquismo y hay normalización absoluta hacia la veneración hacia esos símbolos y actitudes”, se ha denunciado en el debate.

De hecho, el letrado de Libres ha recordado que la Audiencia Nacional es la “heredera directa del Tribunal de Orden Público, creado en 1963 para perseguir delitos políticos”.

De hecho, los raperos sí consideran que hay una persecución ideológica muy clara. Para probarlo, tanto Ludovico como Guillermo Enforma se han lanzado a cantar algunos tuits publicados por miembros de ultra derecha que son, al menos, tan hirientes como los que han llevado a los raperos a la Audiencia Nacional pero que han pasado con absoluta impunidad.

“LA SOCIEDAD ESTÁ OCUPADA VIENDO NETFLIX PORQUE NO SOPORTA VER EL TELEDIARIO”

Acto de la Vorágine. FOTO: Gema Martínez.

No hay que olvidar que todo esto proviene también de la facilidad que se ha dado a estos colectivos de ultra derecha para denunciar estas cuestiones. “No es que los jueces por su mano mayor lo hagan, no hace falta”.

Y, posteriormente, el triunfo se consigue, también, por un “consentimiento” de la sociedad, tal y como ha denunciado un miembro del público. Y esta protesta ha llevado a debatir sobre cómo se ha ido generando esta desafección por las personas enjuiciadas y condenadas y cómo se ha establecido una “falta de empatía” que provoque que “dé igual” que una persona sea condenada a la cárcel por escribir una canción.

Es el “triunfo” del “discurso del marketing”, que lleva a que se hable de grupos de ultraderecha como simples “asociaciones o sindicatos”, desde los propios medios de comunicación; mientras que se juzga delitos por “apología del referéndum”, una definición que verdaderamente ha calado en la sociedad.

Es más, entre los propios raperos están consiguiendo una situación de “auto censura brutal”, tal y como ha denunciado Dj UVE. “Ya hemos llegado a un punto en que se permiten decirnos lo que podemos y no podemos pensar”, ha lamentado. “Acabaremos volviendo a las metáforas”. “Quieren que nosotros no nos atrevamos a ir a un acto a callarles como hacen ellos con nosotros”, ha criticado, enfocando también mucha culpa a la sociedad que “está ocupada viendo Netlix porque no soporta ver el telediario”.