La empresa AMIO INGENIEROS está expandiendo sus proyectos desde Cantabria a México, con el diseño y la ejecución de proyectos de ciudades inteligentes y destinos turísticos inteligentes.

Allí se encuentra uno de sus socios, César Castresana, que está dirigiendo a un equipo de seis personas –y que pronto serán más-, mientras que el otro fundador, Hector Traspuesto, continúa ampliando sus proyectos en Cantabria y el norte de España.

Delegación en México de AMIO Ingenieros, con César Castresana a la cabeza.

Entre sus iniciativas en Cantabria destaca de una forma especial el ‘Proyecto Santillana del Mar Destino Turístico Inteligente y Accesible’, cuya oficina técnica dirigen por encargo del Ayuntamiento de la localidad cántabra y que pretende convertirse en referencia nacional e internacional, a través de la implantación de las iniciativas incluidas en su Plan Director, también diseñado por la empresa cántabra en 2017, como por ejemplo, Santillana Espacio Integrado Inteligente (EII).

Este proyecto, liderado por el Ayuntamiento Santillenense, junto con el Centro Nacional de Tecnologías para la Accesibilidad – CENTAC”, convertirá a Santillana en la segunda localidad europea en ostentar el título de Accesible e Inteligente, mediante la aplicación de iniciativas tecnológicas que mejoren la experiencia de vida de los ciudadanos y visitantes de Santillana del Mar con algún tipo de discapacidad visual, motriz o cognitiva.

Los mayores esfuerzos de AMIO se centran ahora en los proyectos que dirigen en México, en dos estados y varias ciudades. Castresana cuenta en una entrevista en EL FARADIO que ya están cerrando acuerdos para otros dos estados y otras cinco urbes.

“Para nosotros es muy importante diferenciarnos por la calidad del trabajo que realizamos. Es importante que al final se vea una influencia en la mejora de calidad de vida”, asegura Traspuesto sobre el objetivo de su iniciativa.

Para ello realizan un diagnóstico sobre las condiciones en las que se encuentra el municipio en el que trabajan: gobierno, accesibilidad, movilidad, eficiencia energética, etc… para ver qué acciones concretas se están desarrollando, “y comprobar si tienen sentido o pueden ser mejorar”. “Hay que tratar de aprovechar el esfuerzo que los municipios han hecho previamente porque ir a un sitio para implementar algo con tecnología sin más, a veces no tiene sentido”, añade.

Y es exactamente el trabajo que están realizando en el país azteca. “Lo primero que hicimos fue aproximarnos para ver lo que tenían y lo que pretendían”, narra Castresana, hablando de un análisis profundo de la situación en la parte de la ciudadanía, el mundo empresarial e involucrando al universo de la formación. “Hacemos una lista de aspiraciones que tienen los diferentes lados de la sociedad pero también las capacidades que hay, porque así se hace una cartera de proyectos factibles y fiables”.

“Lo prioritario es dar una dimensión social. Los proyectos que preparamos tienen una dimensión de impacto social, de impacto en el desarrollo de las comunidades más pobres y en crear oportunidades”, añade.

“EL VERDADERO DESARROLLO DE UNA COMUNIDAD ES REDUCIR LA BRECHA SOCIAL”

En Cantabria, el equipo encabezado por Hector Traspuesto continúa trabajando en proyectos como el de Santillana del Mar, que pretenden ampliar al resto de Cantabria.

Los proyectos que están desarrollando en México van desde una renovación total del alumbrado de una ciudad hasta un proyecto más ambicioso para lograr un turismo sostenible.

En el primer caso, aunque parece algo bastante normal, Castresana insiste en que su trabajo ha servido para que sea una iluminación pública inteligente “que haga grandes avances en la estructuración de las políticas públicas, que a veces se diseñan según lo que se opina detrás de una mesa”. Ellos se dedican a medir los resultados “de manera inmediata”, para comprobar “si estamos acertando o no”. De este modo se ahorra en tiempo y dinero en inversión.

“No somos idealistas extremos”, insiste Castresana pero añade que les interesa de un modo especial “ayudar a reducir la brecha social”, porque “ese es el verdadero desarrollo de una comunidad, que en México es más grave aún que en España”.

En el caso del turismo sostenible, lo están aplicando en lugares tan turísticos como Puerto Vallarta, donde están buscando mantener los niveles de visitas de la temporada alta y darse más a conocer en Europa para demostrar que tienen más para ofrecer además del sol y la playa.

BENEFICIOS “BIDIRECCIONALES” ENTRE CANTABRIA Y MÉXICO

Su experiencia al otro lado del charco está suponiendo “grandes ganancias y ventajas” que se aprecian en un lugar y otro.

Aquí continúan creciendo, ya que anuncian en directo que están a punto de cerrar sendos contratos con un municipio de Cantabria y otro del norte de España de los que pronto se sabrán más detalles.

Traspuesto revela que se están “creando convenios bilaterales muy beneficiosos entre ambas partes del charco”, aprovechando el intercambio de conocimiento.

“El hecho de que vengamos hacia México desde Europa, donde las ciudades inteligentes están más desarrolladas, ayuda a aprender de los errores y no repetirlos”, añade su socio, que a su vez muestra que desde México están importando modelos de “eficiencia energética” gracias a que este país cuenta con una “estructura más liberal” y “no hay tantas restricciones desde el sector público”.

También están colaborando en incluir inteligencia y big data en las campañas electorales que se van a producir en México el próximo año, con un modelo que puede aplicarse en otros lugares.