«Con la eutanasia seremos de los países avanzados como con el matrimonio gay»
Ha sido eurodiputado, en la comisión de Medio ambiente, Salud Pública y Seguridad Alimentaria del Parlamento Europeo, senador del PSOE por Valencia y actualmente es el secretario de Justicia, Libertades y Nuevos Derechos de la Ejecutiva del PSOE de Pedro Sánchez. Llega a Santander para presentar la Ley de Eutanasia que presentará el Partido Socialista en el Congreso de los Diputados y nos atiende en la sede de Bonifaz, minutos antes de la charla-coloquio en la que participa junto a las dos hombres fuertes del partido en Cantabria, el secretario general de Santander y compañero en la dirección socialista de Ferraz, Pedro Casares, y el secretario general y candidato a la Presidencia de Cantabria, Pablo Zuloaga.
Hace poco, antes de su fallecimiento, en una entrevista en EL FARADIO DE LA MAÑANA, el Doctor Luis Montes – cuando era jefe de la Unidad de Paliativos del Hospital de Getafe sufrió el acoso del PP, ‘Doctor Muerte’ le llamaban- lamentaba el atasco de la Ley de Muerte Digna en el Congreso de los Diputados. ¿Cómo está el asunto?
Nosotros queremos diferenciar eutanasia de muerte digna, que es verdad que se demoró mucho por la mayoría absoluta del PP y después la presentó Ciudadanos cuando el PSOE tuvo su crisis y llegó tarde, aunque con enmiendas está a punto de finalizar. Pero lo que nos trae hoy es un paso más. La muerte digna se refiere a las personas que ya están diagnosticadas de un final y ahí se habla de cuidados paliativos y acompañamiento. Pero la eutanasia es un paso más. Es el derecho subjetivo a que una persona sea ayudada a terminar con su vida, en unos supuestos muy concretos, por su propia voluntad; en supuestos de discapacidad o sufrimientos invivibles y absolutamente intolerables por una enfermedad que no tiene solución, y que le van a hacer morir indignamente, y cuando llegue ese momento decide de acuerdo con la ley que quiere que se le ayude, antes de padecer eso, a morir dignamente. El proyecto se presentó antes del cambio de Gobierno pero se debate como una proposición del PSOE, que si todo va bien para navidades estará resuelta
Si se aprueba la ley, los que quieren morir sufriendo, si eso les acerca más a Dios o lo que quieran, tienen derecho a morir sufriendo. Pero aquellos que no queremos morir sufriendo queremos el derecho a decidir sobre nuestra vida de acuerdo con la autonomía y libertad de nuestra persona.
¿Contara con suficientes apoyos en el Congreso, con solo 84 diputados? ¿Hay tiempo para negociar? ¿Qué sensibilidad ve en otros partidos?
El Gobierno de Rajoy pactaba por lo menos con 5 partidos. No hemos inventado nada que la criatura no estuviera haciendo ya. En una situación fragmental de la política lo fácil se lo arregla cada español en su casa pero estamos para hacer lo difícil. Gobernar con 84 diputados es posible porque este Gobierno tuvo más apoyos legales que el Gobierno que acabamos de desplazar con una moción de censura que es constitucional. Es un gobierno que no nace de una investidura pero tenemos que hacer una investidura cada día que sale el sol. Y vamos a hacer una investidura con la eutanasia y otra con los presupuestos. Hasta donde yo sé hay sensibilidad y hay posibilidad de sacarlo. Ya en el CIS de 2009 el 80% de los españoles estaban a favor o muy a favor de la eutanasia. Y dentro de eso el 60% de los católicos. Por lo tanto el PP tendría que preguntarse si representa a los españoles, a los católicos o a la curia apostólica, que es otra historia. Yo siempre digo que los derechos se ejercen o no; no obligan. La limitación de derechos sí que limita a mucha gente a no divorciarse, no abortar o a no casarse con quien le gusta o a no morir sin sufrimiento. Eso es una limitación de derechos, que aplican generalmente las derechas; las izquierdas aplicamos derechos para quien los quiera ejercer.
¿Hay países de nuestro entorno que tengan regulada la eutanasia como esta proposición del PSOE?
Lo más parecido es Bélgica. Hay básicamente dos bloques. Uno de prohibición de la eutanasia y prohibición del suicidio asistido, que es en el que está España y prácticamente todo el mundo. Por otro lado hay la autorización a la ayuda al suicidio asistido y la eutanasia en Oregon y en Washington, en Estados Unidos; una despenalización en Suiza y Luxemburgo sin regulación y despenalización con regulación en Bélgica, que es de la que más se habla y la más parecida a nuestra propuesta. Si no liberalizamos el código penal y despenalizamos la asistencia a la muerte voluntaria de una persona por los requisitos de padecimiento estamos desprotegiendo a los profesionales de la medicina que son fundamentales para esta práctica. Ahora hay un atenuante, pero vas a ir a la cárcel. Pasaremos a ser de los países más avanzados del mundo como cuando hicimos la ley de matrimonio igualitario.
¿Es estratégico para el PSOE de Pedro Sánchez la recuperación y avance en derechos sociales, como un recuerdo a la etapa de Zapatero?
La historia está plagada de ejemplos de que, cuando las derechas gobiernan, en el mejor de los casos los derechos se limitan. En el peor de los casos, como es con la derecha española, que es bastante carpetovetónica y más acercada a África que a Europa, no solo se limitan sino que retroceden. Aquí hemos tenido, y lo dicen todas las organizaciones que observan los derechos humanos (DD.HH.) en el mundo, un retroceso. Porque tenemos una derecha muy confesional – a mí me gusta decir meapilas– y muy restrictiva de los derechos. Para nosotros es estratégico abrir en libertades y derechos. Está en nuestro ADN. Desde la creación de los DD.HH. se ha notado la mayor evolución en el mundo. Por eso vamos a ampliar los derechos hasta donde podamos y vamos a recuperar los que hemos perdido con el PP.
En ese grupo están las leyes mordaza que sufren los colectivos sociales que se manifiestan en la calle. ¿Hay posibilidad de que se deroguen las leyes mordaza?
Nada es para toda la vida, ni siquiera la Constitución. Esa es la esencia de la política. Llevamos 36 días hábiles en el Gobierno, aunque la gente piensa que llevamos 10 años. De los 180 que apoyaron la moción de censura hay unos cuantos que apoyaron la reforma laboral. Tenemos que saber qué fuerza tenemos y derogar aquello para lo que tengamos fuerza. Y decirle a los españoles que si en las próximas elecciones tenemos más fuerza igual arreglamos el resto. La Ley Mordaza hay que derogarla, aquellos aspectos que hacen que sea una ley retrógrada, que penaliza más a un manifestante que a un estafador que se lleva el dinero fuera. Cuando se hizo el primer acuerdo de Pedro Sánchez con Ciudadanos estaban a favor de derogarla. Luego se dieron cuenta de que no eran tan socialdemócratas y sí igual de derechas que los otros, aunque un poco más fotogénicos, eso no lo voy a negar. Vamos a ver con cuántos contamos. El Gobierno va a poner encima de la mesa las propuestas. Y vamos a ver cuántos se ponen la camiseta para la carrera.
El presidente del Gobierno, antes de estar en Moncloa, dijo que iba a publicar los nombres de la Amnistía Fiscal; ahora dice que no se puede. ¿Por qué?
Bien sencillo. Entre unas palabras y las otras hay un 25 de mayo en el que se aprueba la nueva Ley de Protección de Datos y queda amarrado que no se puede. Tenemos tendencia al tremendismo y a hablar por hablar. Aunque deroguemos esa ley hoy no puede tener carácter retroactivo. Un presidente puede hacer cualquier cosa menos violar las leyes
¿Le toca como secretario de Justicia del PSOE el tema de los políticos catalanes presos?
No debatimos normalmente sentencias. Tengo mi opinión como jurista, no como responsable (del PSOE). La prisión preventiva es muy exagerada. No sólo para los catalanes, para cualquiera. Que estén cerca de sus casas, si hay una instrucción abierta, me parece humano. Si no, se penaliza a los letrados que quieren que los presos estén cerca de su jurisdicción y no a 1.000 kilómetros. Y a los familiares. Lo ideal es que no haya presos en la cárcel por asuntos políticos. En este caso no es por asuntos políticos, sino, según el juez, porque han violado las leyes. En cualquier caso podían estar en libertad vigilada porque luego nos encontramos con situaciones como la de Puigdemont que parece que hay un delito que no lo es y alguno pensará que se ha comido la cárcel innecesariamente. Y puedo asegurar que las cárceles no son hoteles de cinco estrellas.
¿Cómo ve al PSOE de Cantabria de cara a las elecciones municipales y autonómicas?
Lo que percibo es que el partido en Cantabria ha ganado en dinámica. Estamos en pleno mes de julio y esta sede está llena de actividades. Notamos en afiliación un cierto entusiasmo y tenemos buenas perspectivas no sólo para las municipales sino también para las autonómicas. Queda todavía un año y la política está cambiando como que en dos días cambiamos el Gobierno. Puede pasar cualquier cosa pero si el partido en Cantabria lleva el ritmo que lleva le auguro éxitos rotundos. Cantabria es una buena vitrina del nuevo PSOE.
Eutanasiado
732 km entre Gerona y Estremera…..ese es el nivel.