Tras las quejas este verano por la suciedad en la capital cántabra, Santander Sí Puede llevará al pleno de la semana que viene, en forma de moción, la propuesta de recuperación para la gestión pública directa del servicio de “Limpieza viaria, recogida y transporte de residuos urbanos y otros servicios complementarios”, que actualmente viene desempeñando la empresa ASCAN.

Dicho servicio le fue adjudicado a la mencionada empresa durante el segundo mandato del ex alcalde y ex ministro de fomento, Iñigo de La Serna, en mayo de 2013 y por un periodo de diez años.

Desde la formación municipalista entienden que dicho servicio, que cuesta a las arcas municipales un total de 17,5 millones de euros anuales, “no se está prestando de acuerdo con las condiciones recogidas en el contrato”.

De hecho en la propia moción se señalan lo que se consideran “numerosos incumplimientos” del Pliego de Condiciones Técnicas para la adjudicación de este servicio que en su momento fueron acordadas.

De este modo, Santander Si Puede denuncia las “constantes apariciones de montañas de residuos junto a contenedores, llenos a rebosar por falta servicio de recogida adecuado a los ritmos de llenado”. O “el lamentable estado de deterioro en el que se encuentran numerosos contenedores de basura de la ciudad, que la empresa adjudicataria tiene la obligación de reparar o reponer de forma inmediata.”

La formación municipalista también se hace eco de numerosas quejas ciudadanas en ese sentido, como son “la falta de limpieza en los puntos de recogida de residuos o las frecuentes averías en los sistemas neumáticos de recogida de basuras en la calle Castilla y Marques de la Hermida, sin que haya planes de recogida alternativos. Planes que la empresa está obligada a tener y aplicar de forma también inmediata.”

A esto se suma, añaden en la moción, los problemas de “limpieza viaria” tales como, “la reducción del número de personas contratadas para el barrido y limpieza viaria, lo que reduce la frecuencia de paso y la efectividad del servicio.

Tampoco se utilizan, o apenas se hace, los camiones cisterna para limpiar las calles, ni se realizan las labores de baldeo manual que aparecen en el pliego de condiciones. Ni siquiera se limpian los contenedores y las papeleras cuando es más que necesario. No podemos seguir permitiendo que la foto fija de algunos lugares de Santander sean gaviotas y ratas dándose un festín, mientras los vecinos las intentan depositar la basura.”

Todo esto ha generado, en palabras del concejal de Santander Si Puede en el ayuntamiento de Santander, Antonio Mantecón, una situación “de falta de limpieza y suciedad generalizada en la ciudad, que no tiene precedentes, y que ha supuesto un aluvión de quejas de los vecinos durante esta legislatura.” Quejas que, según asegura, “han caído en saco roto y han sido desoídas por el equipo de gobierno, quedando relegadas, sin respuesta y, por lo tanto, sin solución.”

Para Mantecón es “lamentable” que ante esta situación no haya habido una reacción por parte del Partido Popular, de manera que “los incumplimientos del contrato por parte de ASCAN han continuado tras un par de sanciones en 2014. Quizás con la certeza por parte de la empresa de que la alcaldesa Gema Igual no iba a tener la valentía de ejecutar la resolución del contrato”.

Y en cualquier caso, Mantecón, señala al concejal de Medio Ambiente, Jose Ignacio Quirós como máximo responsable de una situación que, según ha manifestado, “no solamente perturba el bienestar de nuestros vecinos, sino que además les avergüenza al precio de 17,5 millones de euros anuales”.

Esto, en opinión de los municipalistas, no es sino la “constatación” de que el Partido Popular de Santander “vive para servir a los intereses de las grandes empresas, que expolian los recursos de la ciudad, y no para defender los de sus ciudadanos”.

En la moción se señala “con claridad” que existen motivos más que suficientes para la resolución del contrato por causas de incumplimiento del mismo, al tiempo que se recuerda que es “competencia del pleno” determinar cómo y de qué manera se gestionan los servicios públicos.

En este sentido Mantecón ha afirmado que “el Pleno de Santander puede decidir este mismo mes entre continuar con esta lamentable situación con un coste exorbitante o devolver al control de los ciudadanos un servicio que hace años era el orgullo de esta ciudad y que jamás debió ser privatizado. Tomada esta decisión, que esperemos que el resto de partidos con representación en el consistorio apoye, el equipo de gobierno tendrá la obligación de acatarla o de lo contrario estaría incumpliendo la Ley de Bases de Régimen Local.”