Si el concurso de acreedores de Delfuego Booking acaba llevando a la liquidación de la empresa, esto supondría la resolución del contrato que mantiene con el Ayuntamiento para la gestión de Escenario Santander.

El Tribunal Superior de Justicia de Cantabria confirmaba este miércoles la noticia adelantada por EL DIARIO MONTAÑÉS de que Delfuego Booking ha presentado la semana pasada la petición de concurso de acreedores de forma voluntaria.

Delfuego Booking es una de las dos empresas que componen la UTE La Campa, que organizó los conciertos de La Campa durante la Semana Grande.

En su programación se incluyó la frustrada actuación del DJ internacional David Guetta, pendiente de la devolución de las entradas después de que no se celebrase (y de varios procesos judiciales, el de esta UTE con el del propio Guetta, y las que interpongan los afectados contra la productora).

EL CONCURSO COMO CAUSA DE RESOLUCIÓN

Estar en concurso de acreedores es una de las condiciones que fijan para resolver (finalizar) el contrato los pliegos por los que se adjudicó Escenario Santander, el espacio de conciertos en el Parque de Las Llamas que gestiona precisamente Delfuego Booking.

En concreto, según el pliego en que se adjudicó, consultado por EL FARADIO, hay un apartado genérico para la resolución del concreto en el que se remite a la legislación estatal.

El pliego remite a la legislación estatal

En detalle, se remite a la Ley de Contratos del Sector Público, a su artículo 223, que dice expresamente en su apartado B que la declaración de concurso de acreedores o la declaración de insolvencia es una de las causas de resolución del contrato.

El artículo 223 cita el concurso de acreedores como una de las causas

Y, para aplicarlo, derivan al artículo 224 de esa misma ley, que acota más el momento exacto, ya que especifica que la declaración del concurso dará “siempre” lugar a la resolución del concurso, si bien se matiza que esto es cuando se abra la fase de liquidación. Hasta que eso no suceda, la Administración puede continuará el contrato si el contratista presta las garantías suficientes para hacerlo.

El otro artículo que citan, el 223, concreta que se refieren a la fase de liquidación

El otro artículo que cita el pliego, 309, va más al detalle, aunque los supuestos que cita no tienen que ver con esta situación de concurso de acreedores.

Aparte de esa alusión genérica, el pliego remite a la hoja resumen, a su cláusula 17. Esa cláusula a su vez vuelve a remitir al pliego (Parece haber un error ya que la cláusula a la que derivan no habla de resolución del contrato, aspecto que figura en el apartado siguiente)

En la hoja resumen a la que remite el pliego se envía a su vez al pliego

EL CONCURSO DE ACREEDORES

El concurso de acreedores es lo que antes se conocía como suspensión de pagos. Es un recurso que tienen las empresas cuando no pueden afrontar todos sus pagos, por lo que recurren a la justicia para que ponga orden. Es una figura que fue muy común durante la crisis y que no necesariamente supone el fin de la empresa que lo pide.

Cuando se presenta y justifica, se nombran administradores concursales, es decir, gestores (suelen ser economistas o abogados designados por la justicia) que se hacen cargo de la empresa y de la toma de decisiones en materia de pagos, entre otros. En este caso, será Calixto Alonso del Pozo.

Escenario Santander

Con la nueva situación, la empresa conserva las facultades de administración y disposición sobre su patrimonio, si bien su ejercicio queda sometido a la intervención del administrador, que deberá autorizar o dar el conforme a cuantas operaciones pretendan realizar, según especifica el Tribunal Superior de Justicia de Cantabria.

Llegado un momento se aprueba lo que se llama el convenio: un documento en el que se establece cómo se pueden afrontar los pagos, con lo que se conoce como quitas y esperas. La quita es una reducción de las deudas con cada acreedor, y la espera es un aplazamiento. Si los acreedores acceden (al ver que es mejor cobrar menos o más tarde que no cobrar), se aprueba el convenio y se procede a cumplirlo.

También puede pasar que no se vea salida, y es entonces cuando se liquida la empresa, cuando esta desaparece, o incluso puede ser comprada por otra. Es esa parte de la liquidación la que llevaría a resolver el contrato en el caso de Escenario Santander.

Hay una fase en la que se decide si el concurso es culpable, es decir, si la situación de impagos de la empresa no se ha debido simplemente a una mala gestión o a factores externos (crisis, problemas en el sector, etc), sino que ya concurren otros factores más negativos (sucedió, por ejemplo, con el Racing de Santander).

Los acreedores de la empresa tendrán un mes a partir de la publicación del auto de declaración de concurso en el Boletín Oficial del Estado para comunicar al administrador concursal la existencia de sus créditos.

LOS AFECTADOS SON ACREEDORES

Desde la representación legal de los afectados por la suspensión del concierto (hay una demanda colectiva que aglutina a un 10% del total de los asistentes) se explica que estos pueden ser considerados acreedores, ya que pagaron por un bien que no recibieron y de cuya devolución estén pendientes. En cuanto se formalice la demanda, se podrá participar en el concurso en calidad de afectados.

El concurso de Delfuego afecta a su reclamación, ya que puede darse el caso de que la justicia acabe condenando a la UTE de La Campa a devolver las entradas y se dé el caso de que una de las empresas que la forman esté en concurso y no pueda afrontarlos o lo tenga que decidir el administrador concursal.

EL PRC PIDE “RAPIDEZ” A IGUAL

José María Fuentes-Pila, portavoz del PRC

Mientras desde el Ayuntamiento se anunciaba que los servicios jurídicos estudian este aspecto, el portavoz del Grupo municipal regionalista, José María Fuentes-Pila, ha exigido hoy a la alcaldesa de Santander, Gema Igual, que “clarifique y solucione con rapidez” la situación en la que queda Escenario Santander después de que la concesionaria haya presentado concurso voluntario de acreedores, al tiempo que ha instado a la regidora a incluir este asunto en la Comisión Informativa de Acción Cultural convocada para el próximo martes, día 25.

Para el regionalista, el PP, que “se ha puesto de perfil durante semanas” en relación al “no concierto de David Guetta”, tiene ahora que “dar muchas explicaciones a los santanderinos sobre qué va a pasar con la gestión de una infraestructura que costó 4,5 millones de euros a la ciudad”.

En este sentido, dice el regionalista, si la empresa declara un pasivo de un millón de euros y sólo 20.000 euros en tesorería, hoy por hoy no puede ofrecer ni la “solvencia técnica ni las garantías económicas mínimas para el desarrollo de la actividad”.

Por otra parte, Fuentes-Pila ha explicado que ‘Escenario Santander’ publicita y vende entradas para conciertos previstos hasta en marzo del próximo año.

Además, ha exigido al PP “transparencia” con la gestión de esta situación y que “no se repitan las medias verdades que llevan años esgrimiendo” desde que otra concesionaria, en este caso la del “deficitario” aparcamiento de Mendicouague, entró en concurso de acreedores en 2016.

EL PSOE PIDE UNA “SOLUCIÓN CLARA Y URGENTE” PARA ESCENARIO SANTANDER

El secretario general del PSOE en Santander, Pedro Casares, ha pedido a la alcaldesa de Santander, Gema Igual, que el Ayuntamiento busque una “solución clara y urgente para Escenario Santander”, ya que “no parece probable” que la concesionaria ofrezca las garantías suficientes para seguir gestionando Escenario Santander, cuando ha presentado suspensión de pagos, al entrar Delfuego Booking S.L., que formó la Unión Temporal de Empresas ‘La Campa’ en concurso voluntario de acreedores.

El líder socialista recuerda que, sobre la prórroga de la concesión de los conciertos de la Semana Grande, el PSOE ya manifestó en el Pleno del pasado 29 de agosto, que no se podía hacer, dado que la empresa no había cumplido con lo pactado.

“La alcaldesa negó entonces esta posibilidad, diciendo que no era una decisión política sino técnica y ahora cambian la versión. ¿Qué ha cambiado ahora?” se pregunta el portavoz del PSOE, que señala que no se puede prorrogar “no porque no hayan devuelto las entradas sino porque no habían cumplido con el cartel de los conciertos”.

En cualquier caso, para el edil, el Ayuntamiento no puede permitir que la empresa no devuelva el dinero de las entradas. La prioridad debe ser que los asistentes recuperen el dinero de las entradas de David Guetta. “Las 10.000 personas que fueron al concierto pagaron por una actuación que no se produjo, y si el artista ha devuelto el caché, la promotora tiene todo el dinero de las entradas para realizar la devolución”.

CASARES DICE QUE LOS GASTOS DE PRODUCCIÓN SON “MUCHO MAYORES” QUE LOS PRESENTADOS EN EL CONCURSO PÚBLICO

Además, en cuanto a los gastos de producción del contrato, Casares señala que los que se están haciendo públicos estos días son mucho mayores que los que se presentaron en la documentación para ser los adjudicatarios de los conciertos.

De la misma forma, el líder socialista quiere saber qué va a pasar con la subvención de 106.000 euros que el ayuntamiento daba para la organización de los conciertos de la Semana Grande. ¿se ha abonado ya dicha cantidad? ¿Es posible que deba devolverse, al menos una parte de ella? “Precaución porque estamos hablando de dinero público” señala.

Por ello, el portavoz socialista considera que deben de informar de todo ello con urgencia en la comisión de Acción Cultural y Promoción Educativa. Y que la mejor ocasión para hacerlo es el próximo martes, 25 de septiembre, en la reunión que ya está convocada para otro asunto.

SANCIONES POR EL USO DEL ESPACIO

Además de la venta de entradas por parte de la concesionaria de este espacio, está pendiente si ha resuelto el problema con las alarmas, después de asegurar la empresa que las desconectaba durante los conciertos porque interferían con el espectáculo al saltar sin motivo.

Esto, junto a otros usos incorrectos del espacio, provocaron una sanción por parte del Ayuntamiento.

La gestión de Escenario Santander se adjudicó a esta sociedad , tras serle renovada, en mayo de 2016 por un importe de 9.100 euros anuales durante un período de cuatro años.